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Las familias de la comunidad El Ermitaño están buscando alternativas para enfrentar los problemas causados por las lluvias que cada año causan deslizamientos, pérdida de cosechas además de poner en riesgo a la comunidad.
En una visita que realizamos recientemente el Patronato de la comunidad del Ermitaño, en coordinación con la Municipalidad y la Comisión de Acción Social Menonita CASM apoyado por Church World Service, nos mostraron que están llevando a cabo la construcción de una obra de Mitigación para canalizar las aguas lluvias y disminuir los efectos que cada año han estado afectando a la población, dañando las carreteras, filtrando las aguas a las casas, centro básico además de poner en riesgo la vida de las familias que allí habitan.
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Las familias del Ermitaño han sido quienes se han organizado para afrontar la situación y disminuir el peligro que representa deslaves y corrientes de agua, mismas que afectan en la época de invierno y que han venido causando daños a la infraestructura.
Según cuenta Edin Giovanni Escobar recién electo Presidente del Patronato de El Ermitaño, esta obra es la segunda que se realiza con este objetivo, en donde surge la coordinación tripartita entre la Municipalidad, Patronato y la Comisión de Acción Social Menonita.
En una entrevista que realizamos nos comentaron que esta comunidad En una entrevista que realizamos nos comentaron que esta comunidad es muy vulnerable debido a las condiciones de los terrenos que permiten la filtración del agua, además de que se encuentra localizada en una pendiente muy pronunciada, evidenciando el alto riesgo producto de los efectos de las lluvias torrenciales que les afectan cada año.
La carretera principal es la única vía de acceso a la comunidad, por lo cual, el evitar el riesgo y mantenerla en buenas condiciones es una prioridad para las familias que viven y transitan por dicha vía.
La obra consta de 97 metros de construcción de un canal que desvía la corriente de agua hacia una un costado del centro básico, evitando que el agua se filtre y arrastre la tierra y los cultivos y provoque deslizamientos.
Alrededor de 120 familias y 180 viviendas conforman la comunidad de las cuales 9 son miembros Patronato, sin embargo, según palabras del Señor Escobar, las familias colaboran y están organizadas para afrontar este problema y desarrollar futuros proyectos todos en beneficio de la comunidad.
CASM con el apoyo de Church World Service, ha contribuido con material para llevar a cabo la obra. Por su parte la municipalidad de Nueva Frontera Santa Bárbara y el Patronato, han contratado la mano de obra y completado el material local para llevar a cabo la construcción, que esperan esté lista para la primera quincena del mes de diciembre del presente año.
Cesar Soriano, técnico de CASM y quien trabaja directamente en la comunidad nos mostró su satisfacción por la labor que ha llevado a cabo la comunidad donde la organización tiene cuatro años de venir trabajando y participando activamente en su desarrollo, promoviendo la agricultura sostenible por medio de capacitaciones y apoyo en este tipo de obras que se espera duren un tiempo prudencial para proteger a las familias en riesgo.
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